domingo, 27 de marzo de 2011

PIEDRA PEREGRINA


Yo era piedra peregrina, rodante, pequeña, mimosa, juguetona, soñadora…en esencia.Y así transcurrieron mis primeros años de vida, mimetizada con todo lo que me rodeaba.

Siempre soñaba con tierras lejanas, horizontes difusos y ansia de libertad.Ya desde pequeña despuntaba por explorar mapa-mundis y jugar a perderme entre pueblos amigos, gentes dispares, mundos coloridos e inexplorados pero provocativos para mi imaginación.

La piedra fue rodando y los derroteros le fueron llevando hacia situaciones extrañas, adversas, de lucha interna incomprensible, hacia un existencialismo sin sentido.Pero seguía rodando, buscando, inventando mil respuestas sin contenido.
Me lamentaba por no ser mariposa, abeja, ave…cualquier cosa que me permitiera volar, abrir mis alas,  escapar, huir en búsqueda de “eso”…para completar mi sensación de vacío.
Entré en una dinámica de sentirme refugiada huyendo de mi misma, donde el miedo era una constante perpetua, siempre amarrada a esa sensación gélida, de incertidumbre, de paralización interna. Y todo ello teñido de tiempo. Un tiempo siempre pegado a mi espalda, siempre testigo de mi danza como un observador burlón, cruel.

Hasta que llegó un día que yo, esa piedrecita, cansada del arduo camino, de la noche, de la lucha sin tregua, del no encontrar nada con sentido o que diera sentido, me dejé caer y arrastrar hacia los abismos oscuros de la desesperación rozando la locura. Sentía que eso era el final, un destino cruel sin respuestas y eso era lo que más dolía los mil “por qués” con desaliento.

Ahí estuve dopándome de llanto, de la hiel de mi dolor, de desgarro interno.Ahí viví y morí cientos de veces. Ahí maduré y la piedra día tras día iba tomando nuevas formas sin darse cuenta.Ahí, precisamente ahí con la espera, el ver pasar el tiempo – antes cruel, ahora aliado – AHÍ encontré la LUZ.

De repente esa luz lo teñía todo. Se vislumbraba todo tan claro que el puzzle fue tomando sentido!.

Todo, absolutamente todo lo que años busqué fuera, estaba dentro de mi ser, en lo más profundo y hermoso de mi corazón.Comencé un romance conmigo misma, tuve que aprender a amarme como niño que aprende sus primeras letras, paso a paso, día tras día, disfrutando del sendero.Y el gozo al conocerme se iba incrementando, hasta que paulatinamente me reconcilié con mi ser, con mi entorno, con el mundo.
A partir de ahí, todo fue magia en mi vida. Las situaciones se iban sucediendo como en un cocktail mágico, las personas que me encontraba eran las que necesitaba en ese momento,todo aquiría y adquiere forma perfecta, todo encaja, todo fluye, todo ES y ESTA donde tiene que SER y ESTAR por que así ha de ser/estar, en su justa medida y en sintonía con la perfección del universo.


Y en medio de esta danza mágica, mi danza como piedra perfecta (con mis defectos) van apareciendo otras piedras perfectas (con sus defectos) y maravillosas. Nadie parece buscar a nadie, simplemente sucede, sin más.

Nuestros caminos como piedras se van cruzando, y por un tiempo más o menos breve, vamos de la mando: sonriendo, disfrutando del paisaje, dejando que hable el corazón, poniendo AMOR y HUMOR en cada paso, dando triunfo a la verdad sentida y compartida. Otras veces las piedras se encuentran y ese encuentro puede ser doloroso en apariencia, pero subyace un aprendizaje, una lección de fondo bella que nos empuja hacia el siguiente paso y así deja paso para que brille nuestra LUZ más profunda. En todo caso, todo está bien pues ES y ESTA en su justa medida, y es como ES.

A veces ESTO da vértigo, supongo que es el factor humano por miedo a lo incierto. Pero sólo nosotros podemos contribuir a liberar esa niebla con paciencia y con FE.

Desde aquí, desde ahora, desde ya, GRACIAS a todas las personas con las que me he topado por enseñarme y empujarme a caminar y ya formáis parte de mi vida.

Y como piedras, sigamos peregrinando y  puliéndonos para brillar más y así poder dar más LUZ al mundo pues juntos somos más fuertes.

lunes, 21 de marzo de 2011

LA LIBERTAD SE HUELE

"Las cadenas de la esclavitud solamente atan las manos: es la mente la que hace al hombre libre o esclavo". Franz Grillparzer

Coger una flor, deleitarse con el mecer de las olas, contemplar un amanecer, escuchar el trino de un pájaro... y sentir como el corazón se despereza y sonríe.
¿Has experimentado esto alguna vez?.Estoy segura de que sí pues es intrínseco al ser humano, cuando así nos lo permitimos, emocionarnos ante la belleza de las cosas simples y gratuítas que nos brinda la vida.

Tenemos un forma especial de complicarnos la existencia: anhelamos una casa más grande, un coche más potente, la última generación en tecnología de móviles, teles de plasma, blackerry, un cuerpo de anuncio...y un sinfín de "deseos" que nos anestesian de sentir, de sentirnos. Pensamos ser libres por poder tener todas estas cosas.Sin embargo el deseo tan desmerusado esclaviza, mina, y nos lleva a un vacío y una insatisfacción interior, que sólo sabemos suplir adquiriendo nuevas cosas, perpetuando así el círculo del sufrimiento.

De igual modo pasa con las personas. Nos sentimos infelices si no tenemos los padres perfectos, los hijos perfectos, la pareja perfecta, los amigos perfectos, los jefes perfectos... y de nuevo, nos llenamos de miseria interior si alguna de esas personas que son importantes para nosotros, no cumplen con nuestras expectativas.

Ante los acontecimientos que nos rodean de desastres naturales, guerras y desolación...es tiempo de PARAR, es tiempo de REFLEXIONAR y empezar a redirigir nuestra vida bajo nuevos parámetros.
La vida no es líneal para nadie. Todo es cambiante, un continuo vaivén de acontecimientos que calificamos como buenos o malos en función de como nos hagan sentir. La reflexión pasa por nuestra efímera existencia, por el despojarnos de todo lo que nos sobre a nivel material y de cargas emocionales.
Y tú, querido lector: ¿qué atesoras y anhelas para tu vida?.Coge lapiz y papel y escribe lo que tu corazón te vaya dictando.Aunque a priori te parezca incongruente y muy lejano. Tu interior es sabio y sabe hacia donde dirigirte. Una vez hecha la elección, es hora de dejar atrás la coraza sin consuelo con la que hemos cargado tan largo tiempo y empezar a abrazar a la vida, abrazarte al sentir.
Observa, aprende, entiende, escucha y mira hacia DENTRO donde se encuentra todo nuestro potencial, nuestra ESENCIA, nuestro diamante, nuestra verdadera felicidad, el pleno GOZO.

Para ello: respira, observa tu respiración, tus pensamientos, qué te dices y cómo te lo dices, cómo se siente tu cuerpo, se consciente de cada paso que das, de tus acciones y reacciones. Todo ello pasa por llevar consciencia, atención en todos tus gestos, pensamientos, palabras y acciones. Meditar es una fórmula eficaz para ir despertando a tu yo verdadero, para encontrarte, para reconocerte y así poder abrazarte y AMARTE.

Al llegar a este GOZO de tu ser, se enciende una luz en tu interior mágica y maravillosa que te alumbra a ti y da luz a cuanto te rodea. Por eso, déjate sentir y empieza a oler TU LIBERTAD, pues de TI depende.

Te deseo el mayor de los gozos en tu caminar.